Las 9 diferencias entre Salud y Bienestar
Los términos de salud y bienestar son conceptos que la sociedad tiende a confundir y a utilizar indistintamente como si fueran sinónimos. Pero realmente, pese a estar relacionados, no se definen exactamente del mismo modo.
Cuando hablamos de un buen estado de salud estamos apuntando que el individuo no presenta ningún tipo de enfermedad, siendo también necesario que el estado físico, mental y social sea óptimo. En cambio, al referirnos a un estado de bienestar, valoramos otros aspectos como el desarrollo correcto de habilidades, de las potencialidades de la persona, además se tendrá en cuenta factores como la espiritualidad o la capacidad de vivir la experiencia presente.
Así pues, estos dos conceptos presentan diferencias respecto a la finalidad u objetivo buscado, a la naturaleza de cada uno, al tipo de medicina utilizada, a qué entienden por estar bien mentalmente, a los términos equivalentes para cada uno, a cómo se relacionan y a las recomendaciones pertinentes para el aumento de uno y de otro.
En este artículo definiremos qué se entiende por salud y por bienestar según la Organización Mundial de la Salud, remarcando algunos puntos para que quede más claro y a continuación presentaremos algunas de las principales diferencias para así comprender mejor el significado de cada término.
Salud y bienestar: definiendo conceptos
Antes de citar las diferencias vemos necesario definir los términos, para saber a qué hace referencia cada uno y del mismo modo también nos puede ayudar a observar o intuir las primeras diferencias.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la salud se define como un estado en el cual el individuo está completamente bien a nivel físico, mental y social, no refiriéndose solo a la ausencia de enfermedad. Es decir, no tener una enfermedad no es la única condición para estar sano, será necesario que se cumpla también que el individuo se encuentre en un buen nivel de estado físico, mental y social.
De este modo será conveniente que se actúe, se muestre activo, realizando unos hábitos de vida saludables, para alcanzar una buena situación de salud, no es un estado pasivo de no enfermedad.
Por otro lado, la OMS considera que el bienestar es el estado en el cual los individuos pueden desarrollar sus propias habilidades y combatir los factores que pueden alterarlas. También se refiere a conseguir autorrealizarse, este término se refiere a la posibilidad de poder alcanzar tu máximo potencial. Del mismo modo que la salud también hace referencias a distintas variables de la persona tanto mental, físico, laboral, emocional, espiritual, económico e intelectual, presentando como requisito imprescindible para conquistar el bienestar ser consciente del propio estado y mostrarse activo.
La Psicología Positiva se refiere a dos tipos distintos de bienestar: el bienestar subjetivo o también denominado hedónico, que presentaría como finalidad lograr el placer y evitar el dolor y el bienestar psicológico o eudaimónico, vinculado más con el desarrollo de potencialidades y virtudes, conseguir un funcionamiento psicológico óptimo.
¿En qué se diferencian los términos de salud y bienestar?
Pese a ser términos con características similares que pueden derivar en confusión, utilizándose así en la vida cotidiana a veces como sinónimos, presentan diferencias y por tanto, en el ámbito profesional no se refieren a los mismo, no son términos intercambiables.
Así pues pasaremos a nombrar las principales diferencias, como por ejemplo, las referentes a sus objetivos, a la naturaleza, a la medicina vinculada a cada uno, a qué entienden por estar bien mentalmente y que recomendaciones son propias para conseguir un buen estado tanto de salud como de bienestar, ayudándonos así a comprender y entender mejor cada término.
1. Estados que contempla cada término
En referencia a la salud, como ya hemos visto, se refiere a presentar un buen estado tanto mental, físico como social, es decir, no presentar enfermedades físicas ni trastornos mentales, siendo también necesario que se realicen hábitos y actuaciones saludables, es decir, que el individuo se mantenga activo. De este modo hace referencia a un correcto estado de las condiciones más generales.
En cambio, el bienestar hará referencia también a otros estados a parte del mental, el físico y el social, como sería el ocupacional, el económico, el espiritual o el intelectual.
2. A qué hace referencia cada concepto
Como ya hemos mencionado una de las condiciones de salud es que no haya presencia de enfermedad, tanto física como mental, es decir que el sujeto no esté mal. Por el contrario el bienestar hace referencia al desarrollo de habilidades, evolución de la persona.
3. La finalidad de cada término
Referente a la salud su principal finalidad o objetivo es evitar o remediar cualquier estado de malestar o enfermedad y conseguir llevar una vida saludable con buenos hábitos, mientras que en el bienestar su máximo objetivo a alcanzar es la autorrealización, cubrir la necesidad de desarrollar el máximo potencial de la persona, estimulando e impulsando sus habilidades y hacer frente a cualquier interferencia que se pueda presentar en ellas.
4. La naturaleza de cada concepto
Se podría considerar que la salud es el estado final a alcanzar, la condición que todo el mundo quiere o pretende llegar, en contraposición al bienestar que presentaría más relación con el proceso, con las prácticas a realizar para lograr el estado de salud.
5. Tipo de medicina utilizada para alcanzar cada estado
Si nos centramos en el tipo de práctica o medicina requiera o utilizada para tratar y conseguir tanto el estado de bienestar como de salud, también observamos diferencias. Con el propósito de mejorar y desarrollar el estado de salud será necesaria la medicina occidental, en otros términos, el médico tradicional encargado de combatir las enfermedades.
En contraste con el bienestar que precisará la medicina oriental, es decir, un tipo de medicina más alternativa, como la práctica de la acupuntura, que se base en la utilización de agujas finas para disminuir el dolor, controlar el estrés y conseguir así el bienestar general; el tai chi, un tipo de ejercicio físico suave y calmado, donde también se realizan estiramientos y la persona marcar su propio ritmo o el reiki, consiste en una práctica espiritual o medicina alternativa que se basa en la imposición de manos, el terapeuta utiliza sus propias manos para transmitir energía y “curar” al paciente.
6. En qué consiste para cada término el estar mentalmente bien
La salud relaciona el estar bien mentalmete con no presentar o estar libre de estrés, ansiedad, depresión… Es decir, si la presencia de cualquier alteración o trastorno mental que puede alterar la funcionalidad del individuo o provocarle un estado de malestar.
Mientras que el bienestar se enfoca más en la atención plena, que se refiere a ser conscientes y llevar la atención hacia nosotros, centrándonos en el momento presente, dejar fluir sin intentar cambiar lo que sentimos. Por otro lado también se propondrá el entrenamiento mental para poder desarrollar las habilidades pertinentes para un bienestar mental.
7. Relación entre los dos conceptos
Así pues, en términos generales y teniendo presente la definición y características de cada término, podemos considerar que la salud es una estado necesario para poder lograr el bienestar general, esto quiere decir, que como ya hemos mencionada el bienestar engloba otros factores en comparación con la salud, pero será fundamental que la condición física, mental y social, así como la no presencia de enfermedad, definición propia de salud, se cumpla para que el individuo pueda alcanzar el bienestar.
8. Denominación de cada término
Es acertado hablar de bienestar cuando nos referimos a salud, es decir, la salud se puede denominar también bienestar, si estamos sanos nos sentiremos bien. Pero, contrariamente, el bienestar no puede denominarse salud, ya que el bienestar como hemos dicho se refiere más al proceso de desarrollo, busca como resultado alcanzar la salud, pero no es un término equivalente a salud.
9. Recomendaciones para mejorar la salud y el bienestar
Como ya adelantamos en apartados anteriores para tener o aumentar el estado de salud, será necesario llevar hábitos de vida saludables para así evitar enfermedades. En el caso de padecer la enfermedad, como es obvio, será indispensable acudir al médico y realizar el tratamiento adecuado para recuperar el buen estado de salud.
De este modo algunas de las prácticas saludables aconsejadas son: cuidar lo que comemos, llevando una dieta equilibrada; hacer ejercicio de manera regular, se recomienda entre 3 a 5 veces por semana; dormir bien, mínimo 7 horas diarias y no consumir sustancias adictivas como el tabaco o el alcohol.
En referencia al bienestar, como ya hemos dicho, con el propósito de incrementar será necesario trabajar para aumentar las potencialidades y habilidades del individuo. Así pues, estas son algunas de las recomendaciones que se dan para alcanzar tal objetivo: aceptar las propias emociones, vivir el presente, asumir riesgos controlados, centrarse y atenderse a uno mismo, de manera introspectiva, vivir según tus valores y creencias, hacer lo que nos hace feliz y romper con aquello que no nos aporta nada bueno y nos perjudica o encontrar tiempo para estar con uno mismo. En definitiva, ser más consciente de uno mismo y de lo que estamos viviendo y sintiendo en cada momento.